Mi pasión por la repostería nació desde muy pequeña, mientras observaba a mi madre y mis tías preparar postres clásicos y deliciosos que llenaban cada rincón de la casa con su aroma. A lo largo de mi vida, siempre soñé con tener una pastelería. Este sueño comenzó a tomar forma hace algunos años, cuando empecé a hacer postres como un hobby para celebraciones familiares, reuniones con amigos y ocasiones especiales en casa.
A inicios del 2020, algunos amigos cercanos comenzaron a recomendarme, y fue entonces cuando decidí dar un paso más allá y vender mis postres. Finalmente, en agosto de ese mismo año, nació Dulce Bocato, una marca creada con el propósito de compartir mi pasión con más personas.
En 2024, junto a mi equipo, decidimos dar un giro renovador y realizamos un cambio de imagen que dio lugar a Bocchia.
Disfruto enormemente ver a mis hijos saborear lo que preparo; ellos se han convertido en mis mayores críticos y mi principal fuente de inspiración.
Hoy en día, trabajo junto a un pequeño pero dedicado grupo en nuestro centro de producción, donde horneamos cada postre con esmero y amor. Sueño con que este espacio crezca y se transforme en una pastelería abierta al público, un lugar que envuelva a nuestros clientes con esa magia y calidez que yo sentía de niña.

Maria Jesus Palacios,